jueves, 9 de octubre de 2014

TAG Heuer: Cruzando Barrras


TAG Heuer casa relojera suiza, reconocida mundialmente por sus diseños e incuestionable precisión desde 1860, ha cruzado su savoire-faire de microingenieria relojera con la de la telefonía móvil, y ha creado su propio SmartPhone, se trata de TAG Heuer LINK, el primer teléfono touchscreen inteligente de lujo.
TAG Heuer presenta este nuevo artilugio como la máxima herramienta de comunicación. Ingeniado por suizos, construido por franceses y operando con el mejor Sistema de Operación del mundo el OS Andriod, comparte los valores de todas las creaciones de la marca suiza: diseño de punta, acabado artesanal, fidelidad incomparable y un fuerte compromiso con la vanguardia. El TAG Heuer LINK es una máquina de alto rendimiento de extrema fuerza y confianza, garantizada por una batería de controles de calidad que bien exceden los estandares de la industria. Entre las características mas destacadasse encuenta su pantalla touchscreen de 16 millones de colores en un display de 3,5 pulgadas, una cámara HD de 5 Megapíxeles, 11 horas de playback musical, y gracias a Andoid acceso a mas de un cuarto de millón de Aplicaciones para descargar.
Desde luego viene con una serie de accesorios TAG Heuer, como una galería de papeles tapiz, widgets, animaciones, diversos diseños de pantalla, íconos y ringtones.
Este smartphone fue lanzado como propuesta esencial tanto para la diversión como para la devoción, ideal para los negocios y el entretenimiento. Dada la herencia relojera que tiene, el  TAG Heuer LINK es un instrumento de telecomunicaciones de alto calibre y amplisimas capacidades, lanzado al mundo para marcar una diferencia, tal y como TAG Heuer nos tiene acostumbrados.




Hotel Tamanaco Intercontinental

Descubra un oasis tropical en el corazón de uno de los barrios más prestigiosos de compras, entretenimiento y negocios de la ciudad. Este hotel de lujo en Caracas cuenta con una piscina al aire libre, tres canchas de tenis iluminadas y Le Gourmet, el mejor restaurante de la ciudad. Explore imponente monte Avila en teleférico, o disfrutar de tiendas de antigüedades en el histórico pueblo de El Hatillo. Revive con cócteles y ver los famosos atardeceres de Caracas desde nuestra terraza del bar El Punto.
 
El Hotel Tamanaco Intercontinental es un oasis tropical en el corazón de Caracas, ubicado al final de la avenida principal de la urbanización Las Mercedes cerca de centros comerciales, restaurantes y lugares turísticos. Es un hotel cinco estrellas con mas de 50 años de experiencia en el servicio hotelero, dada su ubicación estrategica es un símbolo para los caraqueños.
Este hotel ha sido testigo de excepción de acotecimientos nacionales, sociales y sus espacios han recibido el brillo de luminarias del cine nacional e internacional, músicos, figuras de la realeza, hombres de negocios de todos los ámbitos del orbe se han hospedado en sus espacios.
El Hotel Tamanaco Intercontinental tiene varias características que lo diferencian de los demas hoteles de su categoría en la ciudad. Su único diseño, el buen servicio, la ubicación, la vista a la ciudad y el fácil acceso a sus instalaciones.
Entre otros servicios el Hotel Tamanaco Intercontinental ofrece sus servicios de restaurant, gimnasio, sauna, piscina y canchas de tenis iluminadas.

Restaurant & Lounges
 
     El restaurante Le Gourmet: el restaurante más exclusivo de Caracas. Maute Grill: comida típica venezolana.

 
     Servicios y Servicios
 
     Máquinas Life Fitness de nuestro gimnasio y pesas le dará un entrenamiento, seguida de una sauna, un baño turco y masajes. Una piscina y cancha  tenenis iluminada.
 
     PAQUETES ESPECIALES
     Siempre hay algo especial en un hotel InterContinental. Si usted está buscando para una escapada llena de diversión.

twitter Hotel tamanaco https://twitter.com/ICTamanaco

Excelente Servicio La atención, servicio e instalaciones fueron muy buenas. El único inconveniente fue la conexión a internet aunque sé que es problema local.
 
Mejor Hotel de Caracas. He tenido la grata experiencia de alojarme varias veces en el Hotel Tamanaco y cada oportunidad confirma mas que es , sin duda alguna, la mejor opción de estadía en Caracas, Su Ubicación, confort de habitaciones y servicios lo demuestran, además que la vista del imponente Avila al momento de desayunar es especialmente gratificante. 


Puedes COMPARTIR esta entrada en tus redes sociales: Twitter; Facebook; Google+
Con solo presionar un botón. ¡gracias por compartir!
 
Sígueme en Twitter

Sígueme en FaceBook


Lecturas Relacionadas

 

Directorio de Viajes Hoteles y Turismo 

La Semana Internacional de la Moda: 4 ciudades

El OktoberFest 2014 

Tranastlánticos: El Begoña

Pobre Francia: de la grandeza a la ridiculez

Nadie podrá dudar que el general Charles de Gaulle fue la figura cimera de la política francesa del siglo XX. Nadie podrá dudar que siempre se ubicó en la derecha política. Creó la Francia Libre, para además de enfrentar a las fuerzas hitlerianas que ocuparon su país, fuera una alternativa a los guerrilleros comunistas y socialistas que en la campiña y en las ciudades francesas enfrentaban desde la clandestinidad a la bestia nazi. Después de la derrota del fascismo y la liberación de Francia enfrentó y derrotó a los candidatos de la izquierda hasta que en 1969 fue vencido en un referéndum, presentó su dimisión y se retiró de la política. Fue el enterrador de la putrefacta IV y fundador de la V República (cualquier similitud con otros países es pura coincidencia). Pero, ante todo, el general De Gaulle fue un gran patriota, que amaba a su país.


El pensamiento político de Gaulle en materia internacional se sustentaba en tres aspectos:

1. La consideración de que la amistad franco alemana debía ser el eje sobre el cual había que construir la Europa del futuro. Esto, a pesar de la añeja rivalidad entre los dos países y de que Francia venía saliendo de dos guerras mundiales en las que fue atacada e invadida por el país germano.
2. La necesidad de evitar que Gran Bretaña fuera la potencia preeminente de Europa. Esto, a pesar que esa había sido, en la recién finalizada guerra, sustento fundamental para su patria ocupada, lugar donde fundó la “Francia Libre” y en la cual se refugió después de la entrada de las tropas nazis en su país.
3. La obligación de terminar con la hegemonía de Estados Unidos en los asuntos europeos



De Gaulle fue más allá. En su propuesta de crear la “Europa de las Patrias” expuso su firme oposición a aceptar el monopolio estadounidense para el uso de armas nucleares en el seno de la OTAN y también su firme obstrucción a que Gran Bretaña integrara la Comunidad Económica Europea. Incluso, era tan receloso de la hegemonía estadounidense que, posteriormente se propuso convertir en oro, las reservas francesas en dólares.

Pensaba –con razón- que la seguridad de Europa debía ser responsabilidad de los europeos, no de una potencia extra continental y por ello se propuso fortalecer las fuerzas militares francesas y reducir los vínculos de su país con la OTAN, por ello, Francia jamás integró el componente militar de la alianza. De Gaulle no quiso subordinar las Fuerzas Armadas de su país al mando estadounidense. Esto, a pesar que Estados Unidos jugó un papel fundamental en la liberación de Francia de la Alemania de Hitler.

Ningún presidente francés de la V república, de derecha o de izquierda se atrevió a quebrar esa norma que se insertaba en lo que se llamó Doctrina De Gaulle y que se llegó a inscribir en orgullo e identidad del pueblo francés.

Pasaron 43 años, hasta el momento que un presidente galo se arrodilló ante Estados Unidos. En un discurso pronunciado en la Escuela Militar de París el 11 de marzo de 2009, Nicolás Sarkozy, informó su decisión. En un atisbo de su mala conciencia se preguntó "¿Quién puede saber lo que habría hecho hoy De Gaulle?”.

A continuación trató de justificarlo con explicaciones, -más para tranquilizar su conciencia que para explicárselo al humillado pueblo francés-, cuando incluso diputados de su propio partido rechazaron sus argumentos. Aseveró que, “Francia conservará su independencia” pero terminó implorando credibilidad al afirmar que "Las Fuerzas Armadas son y seguirán siendo nacionales. No podrán integrarse en ningún Ejército supranacional del que perdamos la responsabilidad. Además, nadie quiere eso".

Extendió su alegato, "Conservaremos nuestra fuerza nuclear de forma independiente y conservaremos nuestra libertad de opinión a la hora de enviar tropas" y concluyó a la defensiva diciendo que afirmaba “solemnemente que los que aseguran que nuestra independencia se verá mermada, engañan a los franceses”.



El 2 de abril de 2009 se celebró una reunión de la OTAN en las ciudades fronterizas de Kehl (Alemania) y Estrasburgo (Francia), separadas por el Rhin. Allí, Sarkozy oficializó la petición francesa de reingresar en el mando integrado de la Alianza. Fue 60 años después de la creación de la OTAN y 43 desde que De Gaulle envió una carta al presidente estadounidense Lyndon Johnson comunicándole que Francia se apartaba del "núcleo duro" de la OTAN, conminándole a que retirara las bases norteamericanas de territorio francés.

A partir de ese momento cual estrella de una película bélica, Sarkozy desató anuncios que alimentaban su necesitado ego mediático: Francia envió un nuevo batallón con 800 soldados al este de Afganistán, el país asumió la comandancia de la región centro durante un año a partir del verano de 2009, lo que significó un mayor aporte de efectivos a esa “causa” y se ufanó de que "llegará el momento de tomar las decisiones necesarias para que Francia tome todo el lugar que le corresponde en las estructuras de la OTAN” . Hasta cuando llegara este momento, subrayó su determinación de "trabajar de la mano de todos los socios europeos para dar un nuevo impulso a la Europa de la defensa". Lo que no dijo es que esa Europa de la defensa de la que hablaba estaría en manos de Estados Unidos, idea contraria a la que el visionario General De Gaulle soñara para su país.

Remató exponiendo su orgullo por la subordinación de Francia a Estados Unidos, al agradecerle a George Bush "el apoyo vigoroso que acaba de dar a esta iniciativa". Y en un anunció que hizo remover a De Gaulle en su tumba anunció orondo que la iniciativa de EEUU de colocar un escudo antimisiles en Europa "contribuye a la seguridad de los aliados". Pobre General de Gaulle.

Así las cosas, llegó 2011 y con ello el momento de invadir a Libia. La película de sometimiento de Francia a la OTAN debía seguir un derrotero diferente para tratar de salvar su honor. Sarkozy se propuso jugar el papel más importante, incluso se adelantó a Estados Unidos en los bombardeos a las ciudades libias. Se reunió con sus cófrades, los mismos que generaban dudas a De Gaulle, Gran Bretaña y Estados Unidos y acordaron que "la OTAN debería desempeñar un papel clave en la estructura de mando en el futuro".

Al respecto, el gobierno francés propuso crear una "dirección política" de la intervención en Libia, sin excluir que las operaciones se apoyen en los medios militares de la OTAN. El ministro de Asuntos Exteriores, Alain Juppé, explicó que la iniciativa, “que se concretaría con reuniones de los Estados participantes y la Liga Árabe, partió del presidente Nicolás Sarkozy. Juppé sostuvo “que la intervención sería ‘breve’, un deseo en el que coincide Francia con Estados Unidos, dijo. El ministro insistió en que en el caso de Libia ´no habrá intervención en tierra’ porque la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU que abrió la vía a la creación de una zona de exclusión aérea sobre ese país no lo autoriza”.

Aunque Francia quisiera competir con Estados Unidos en cantidad de invasiones simultáneas, el canciller aclaraba que no habría intervención en tierra porque –imaginamos- sus tropas se encontraban ocupadas en la incursión en Costa de Marfil y el genocidio contra ese pueblo, esta vez con el aval y la conducción del Secretario General de Naciones Unidas, Ban ki Moon.

Como toda puesta en escena, esta obra tendría su capítulo final: el ridículo de Francia y su presidente. Ahora, en voz de su ministro de defensa, Gérard Longuet, se escuchó una amarga queja en la Asamblea Nacional de Francia porque el país y el Reino Unido estaban soportando “lo esencial de este esfuerzo, aunque Estados Unidos siga aportando un apoyo de ámbito aéreo indispensable, pero ya no es hoy un apoyo de ataque en tierra, sin el cual no es posible aflojar el cerco que pesa sobre ciudades asediadas como Misrata o Zenten”,

El Canciller de Sarkozy, -en su desesperación- y sin dar más detalles, apeló a que el Secretario General de la OTAN Anders Fogh Rasmussen “cumpla su palabra con hechos” pues Francia “es el mayor contribuyente a la misión y ha animado a los otros aliados a seguir sumando recursos”.

Con su metro y 67 centímetros Napoleón llevó a Francia a la grandeza y al respeto de las potencias. Con su metro 65, Sarkozy la ha llevado a la ridiculez y a la dimensión de su propia estatura. Pobre Francia. 

Puedes COMPARTIR esta entrada en tus redes sociales: Twitter; Facebook; Google+
Con solo presionar un botón. ¡gracias por compartir!
 
Sígueme en Twitter

Sígueme en FaceBook



Lecturas Relacionadas